Por Melina Bonato y Liliana Borges

El periodo más crítico de un becerro es la primera semana. En el primer año de vida se produce alrededor del 50% de la tasa de mortalidad, ésto debido a varios factores de estrés que influyen fuertemente la salud El estrés es una respuesta del animal a un estímulo dado y éste se asocia con situaciones negativas donde se ve comprometida la salud del becerro y su rendimiento y productividad son reducidos, especialmente en los primeros días de vida. Los animales pueden sufrir diferentes tipos de estrés: fobia (miedo a lo desconocido) o físico (hambre, sed, fatiga, lesión o temperaturas extremas), que conducen al inicio de una enfermedad y una repentina caída en el rendimiento.

INSTAURAR LA INMUNIDAD

En la primera semana de vida de los becerros la inmunidad pasiva no está totalmente desarrollada por lo que son susceptibles a enfermedades neonatales comúnmente ubicadas en el área de crianza como diarrea y neumonía, ésto a su vez puede llevar a altas tasas de mortalidad.
Por esta razón, la nutrición en esta etapa es clave y un factor decisivo para una ganadería exitosa. Por ejemplo, el obtener calostro durante las primeras horas de vida proporcionará anticuerpos a la becerra. El calostro tiene una alta concentración de sólidos totales, proteínas e inmunoglobulinas (IgG, IgA e IgM) la concentración de éstas, disminuye con el periodo de lactancia.
El calostro debe administrarse rápidamente después del nacimiento ya que las inmunoglobulinas son mejor absorbidas entre 12 y 18 horas, después de 24 horas del nacimiento, la absorción de inmunoglobulinas por los becerros es reducida.

DESARROLLO RUMINAL

Durante la lactancia, los alimentos sólidos son poco a poco incluidos a la dieta y éstos son cruciales para el desarrollo del rumen, ya que preparan al animal a la transición de un monogástrico a un rumiante (poligástrico). La ingestión de estos alimentos tiene un gran impacto durante el destete, ya que evitan el estrés, problemas digestivos y rechazo de alimentos. En el mercado se pueden encontrar muchos aditivos naturales que son capaces de proporcionar compuestos que estimulan al organismo a responder más eficientemente a estímulos estresantes ocasionados en el campo.

Muchos de estos aditivos se usan para proporcionar refuerzo inmunitario y prevenir la contaminación por patógenos, ofreciendo una mejor salud al animal. Las levaduras son ampliamente utilizadas en la nutrición de rumiantes, mostrando varios beneficios.

 

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